No pude evitar soltar un bufido. ¿Acaso ese mandril sabía lo que era el amor?
— No te atrevas a comparar lo que siento por ella con lo que tú y tu polla os habéis encaprichado esta vez.
— Tú qué sabrás..
— Sé que no la quieres ni la mitad de fuerte que la quiero yo,porque para estar enamorado de alguien hay que conocerle. Y tú,lo único que conoces es su talla de sujetador.
— Chaval,la conozco mucho mejor que tú.
Esto era el colmo de los colmos. ¿De dónde diablos había salido ese tío?
—Ah,¿sí? ¿Acaso sabes lo que hace cuando está triste?
—Llora,come helado y ve películas de Channing Tatum,como todas las tías.
Y ahí estaba,la demostración de que yo tenía razón.
—Cuando está triste sonríe. Sonríe hasta que acaba el día,una vez el sol puesto y la madrugada a flor de piel,se pone ese jersey viejo,ya roído,el que le regaló su madre y le recuerda a ella. Se prepara un té,caliente hasta que arda; vainilla y caramelo,su preferido. Busca su cuaderno,en el que esconde tantos secretos como agua tiene el mar. Y llora,llora todos sus sentimientos sobre el papel. Mientras,John Mayer suena en sus auriculares cantándole una chica tal vez como ella; enamorada de la vida y del amor. Mira por la ventana buscando una estrella a la que agarrarse,alguna que le conceda el deseo de seguir amando sin dolor. La busca para que le diga que todo irá bien si es fiel a si misma. ¿Ves? Yo tenía razón,no la conoces,no la quieres. Si lo hicieras,jamás te atreverías a decir que es 'como todas las tías'. Ella no es como ninguna,no ríe como ninguna,no canta como ninguna y por supuesto,no come helado y ve películas de Channing Tatum cuando está triste; ya que,hasta su tristeza es increíblemente preciosa.